La creatividad, el juego y el vínculo son ingredientes principales, nos adaptamos al momento del desarrollo para poder ayudar desde las necesidades del niño. Se realizará una primera sesión con sus criadores principales donde recogeremos información y objetivos de los padres. Posteriormente se realizará unas sesiones dónde veamos al niño para finalizar esta recogida de información y con todos los datos proponer una intervención personalizada.
Muchas veces dudamos en cuándo tiene que acudir un niño a consulta, no hay unas “pautas” concretas para poder hacer una indicación. Si como padres sentimos una preocupación, nos da la sensación de que algo no esta bien, desde el cole nos aconsejan, etc. Deberíamos consultar con una profesional.
Si lo que consultas es algo que tiene que ver con una etapa del desarrollo el profesional podrá explicarte el porqué ocurre y aliviar tu preocupación. Muchas veces tardamos en decidir si consultar con un profesional, si el problema no es algo a tratar será indicado y en caso de que haya que comenzar un trabajo terapéutico lo cogeremos al inicio con lo que nos será más sencillo de trabajar.
La terapia con niños es diferente que con adultos, debemos ser muy conscientes de la etapa de desarrollo en la que el niño se encuentra y las peculiaridades de la misma. Esto es muy importante ya que hay cuestiones que aunque puedan parecen patológicas en determinas etapas son parte de lo que debe o puedo ocurrir.
Una caracteristica principal en población infantil es que la comunicación verbal no esta completamente desarrollada. Cuando nacemos y durante un tiempo nos comunicamos por medio del llanto, y aunque más tarde va apareciendo el lenguaje no significa que haya una comprensión completa o que sea el medio con de ellos más cómodos se sienten.
Los niños se expresan mediante su cuerpo, la expresión verbal todavía no acabo de formarse y a través del juego es más sencillo para ellos. Podemos comunicarnos desde el juego, tener información de lo que pasa en sus vidas y también resolver o entender desde ese mismo punto los conflictos emocionales que se les presentan. Es imprescindible que los terapeutas se adapten a la comunicación del niño y no al revés. Un ejemplo que muchos padres comentan es mi hijo cuando sale del colegio le pregunto que tal ha ido su día y no me cuenta nada, y lanzamos esta pregunta al aire, si como padres por la tarde jugamos a profesores y alumnos, o cogemos unos muñecos ¿ el niño no habla de lo que ha ocurrido ese día en el colegio?
Debemos comprender que los niños aunque parezca que entienden el mundo adulto siguen siendo niños y necesitan que nos adaptemos a sus características y no al revés.